Quizás de entre las medusas que ya conocías de por si antes de entrar en nuestro portal, y las que ahora conoces al ver las especies que te hemos preparado, hayas descubierto muchos tipos de medusas que pensabas que ni existían o que eran parte de la imaginación de alguna persona amante de la ciencia-ficción. Pero todavía quedan algunas sorpresas por descubrir en este apartado, ya que te vamos a mostrar algunas de las medusas más raras de todo el mundo y que se han encontrado hace relativamente poco, por lo que no se tiene mucha información sobre ellas, pero solamente al ver su fotografía puede dejarnos impactado tanto por las formas que tiene, como por su colorido. Sin más dilación te presentamos a estas rarezas del mundo.
Narcumedusae
Nuestra pequeña amiga tiene un nombre complicado de pronunciar y la historia de su descubrimiento hace apenas unos años merece ser contada. Un equipo de investigación había sido subvencionado para estudiar el fondo marino, teniendo en su poder bastante maquinaria y naves no tripuladas con las que poder grabar las profundidades sin que hubiese riesgo para ninguna persona. En una de estas investigaciones, la cámara capto esta pequeña medusa con una coloración azul. Pero poco más se conoce de ella, puesto que no se recogieron muestras sobre ella, aunque si la bautizaron con el nombre de Narcumedusae. Esta medusa se encontraba viviendo a diferencia de las especies conocidas, que prefieren habitar cerca de las superficies, a unos 3000 metros de profundidad, teniendo un tamaño muy reducido.
Una medusa desconocida llamada Narcumedusae.
Aulacoctena
En las investigaciones en las profundidades también dieron con medusas muy coloridas pero a la vez extrañas. Es el caso de esta medusa de color naranja llamada Aulacoctena. Lo que más llama la atención de esta especie, además de su color intenso, pocas veces visto en otras medusas, sino porque es completamente redonda, sin tentáculos, a excepción de una pequeña protuberancia alargada de color blanco de la que no se sabe a ciencia cierta que función tiene. Muchos científicos piensan que puede ser un cebo que utiliza para atraer a sus víctimas a su interior. La coloración de su piel se ha descubierto que es debido a que en su dieta se encuentran gusanos de tierra, que obtiene escarbando en el lecho marino y de esta manera darse el festín, tomando la coloración de estos animales.
La medusa aulacoctena se alimenta sobre todo de gusanos de tierra.
Crossota millsae
Aunque ya había sido descubierta anteriormente, esta medusa tiene un aspecto parecido pero a la vez diferente de las que se incluyen en su especie. Debajo de su umbrela característica, que como se puede apreciar en la foto es transparente existe otra capa de tejido que en este caso es de un color rojizo muy intenso, que le da mucha personalidad y le ayuda a diferenciarse de otras especies de medusas mostrando su anatomía interna. Sus tentáculos como puedes ver son realmente pequeños pero de igual manera le ayuda a capturar con su veneno presas desde plancton hasta pequeños peces. Se han descubierto que habitan por las profundidades cercanas a California, aunque no suelen encontrárselas varadas en la playa.
Crossota es muy extraña por su color rojizo.
Thysanostoma
Finalmente y no menos importante nos encontramos con una medusa que asombra sobre todo por su color. Con una forma que nos recuerda a cualquier otra medusa común, la Thysanostoma tiene una coloración rosácea-violácea con una tonalidad metalizada, como se diría en el mundo de los coches. Su aspecto parece sacado de una película del espacio pero es completamente real y fue encontrada por un vigilante de la playa en Australia. Comúnmente alguna de las especies de esta medusa se encuentran en esta localización pero jamás con esta tonalidad tan brillante ni tampoco con un tamaño como el que se encontró.
Thysanostoma, una medusa encontrada en las playas australianas.
